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La escena de desarrollo de videojuegos en América Latina sigue creciendo y, conforme pasa el tiempo, algunos estudios comienzan a aventurarse más allá de las propuestas para móviles o propias del movimiento indie en las que se han apoyado por años. En 2021 vivimos el lanzamiento de Cris Tales, RPG de estilo tradicional creado por el estudio colombiano Dreams Uncorporated, en colaboración con SYCK, que desde su previa había llamado la atención por su arte, estilo de juego y mecánicas. Se dice que la manzana no cae lejos del árbol y no se puede negar la influencia del género JRPG en Latinoamérica, mercado donde pegó en grande. Precisamente, Cris Tales apela hacia lo disfrutado y aprendido por generaciones de jugadores del género y conociendo sus límites, presenta una aventura que podría hacer pensar que se ha dado un paso importante en el desarrollo de juegos en la región.

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Cris Tales: la carta de amor a las bases y tradición de los JRPG

Lo primero que debemos tomar en cuenta al tomar la aventura de Cris Tales es que se trata de un RPG tradicional con un sistema de batallas por turnos, cierta interacción con los NPC, lineal, con exploración limitada en zonas definidas y una integración interesante entre su principal mecánica y su historia. En este juego tomamos el papel de Crisbell, una joven que ha crecido en un orfanato y cuya historia cambia dramáticamente de un día a otro tras la aparición de una rana, Matías, que habla y la amenazante presencia de fuerzas malévolas lideradas por la Emperatriz del Tiempo que terminan por despertar el poder que tiene en su interior.

Sí, apelando a la idea de la magia como arte perdido que conocimos en Final Fantasy VI, Cris Tales hace lo propio iniciando y desarrollando su historia en torno a Crisbell y su existencia como Cronomaga, o sea un personaje capaz de ver el pasado, presente y futuro e interactuar de forma que las cosas cambien en cada momento del tiempo, obviamente teniendo un impacto en el ahora y en el mañana.

Sin caer en spoilers, Cris Tales nos lleva a este mundo fantástico creado con inspiración en el Realismo Mágico, más adelante hablaré de ello, en el que existe la posibilidad de cambiar las cosas, para bien o para mal, y en el que Crisbell, junto con los compañeros que encontrará, conocerá su origen y tratará de crear el mejor futuro posible no solo para ella, sino para las personas con las que ha crecido y en un intento por mejorar la vida de aquellos que aparecerán en su camino.

El realismo mágico y la perspectiva inspirada en Colombia

Aunque ha sido motivo de crítica, insostenible por cierto, por parte de un sector de jugadores, la escena de desarrollo latinoamericano de videojuegos ha encontrado en su historia y su cultura elementos suficientes para inspirar sus obras. Cris Tales no es diferente y durante el recorrido, notarás que las catedrales y la arquitectura de estilo gótico, imponente siempre, son pieza esencial del diseño de arte del juego. El equipo de Dreams Uncorporated no dudó en rendir un homenaje a su país y en algunas partes de su mundo de fantasía encontraremos edificaciones que representan la Puerta del Reloj de Cartagena de Indias, el Santuario de Nuestra Señora de Las Lajas o el Museo de las Cataratas del Tequendama, obras arquitectónicas trascendentales en la historia colombiana.

"Este mundo fantástico se presenta ante nosotros como una caricatura pero aun siendo una carta de amor para los JRPG, cuenta con un estilo propio"

Precisamente, uno de los detalles que vuelve encantador a Cris Tales es su estilo de arte, pues este mundo fantástico se presenta ante nosotros como una caricatura pero aun siendo una carta de amor para los JRPG, cuenta con un estilo propio que denota la influencia de la animación japonesa, pero adaptada a un diseño latinoamericano. De ahí que personajes como Crisbell, Wilhelm, Cristopher, Enzo y demás, sean una representación de niños, jóvenes y adultos que fácilmente podrías encontrarte en Colombia u otro país de América Latina.

Durante la previa al lanzamiento, Dreams Uncorporated definió a Cris Tales como una "Fantasía Endémica", idea que parte del realismo mágico de Gabriel García Márquez en Cien años de soledad y que va en la dirección opuesta pues el juego toma elementos reales de Colombia y los transforma en una historia de fantasía. Fácilmente, y esa es otra de las virtudes de Cris Tales como juego y propuesta de entretenimiento, podría ser una historia contada en alguna localidad de ese país.

Como lo mencioné, el arte de Cris Tales tiene encanto propio, luciendo cuando tiene qué hacerlo y reconociendo sus límites en ciertas partes donde apela a la abstracción. El mundo de este RPG, al final inspirado en un país de América Latina, muestra la brecha que existe entre los poderosos y los que menos tienen, en algunas partes incluso te encontrarás con historias breves de NPC quienes luchan por la igualdad y por acabar con aquellos que detentan el poder para sus intereses sin importar las consecuencias que esto acarrea para todos.

Siguiendo el centro de su propuesta, Cris Tales nos permitirá, en aquellas zonas donde se desarrolla la historia, ver al mismo tiempo el pasado, el presente y el futuro. En el centro se encuentra Crisbell y su equipo en el ahora, del lado izquierdo está el ayer y del lado derecho el mañana. No cabe duda que esta simple, pero poderosa y acertada propuesta es capaz de interesar al más escéptico de los jugadores y es que, digamos, en el centro de una ciudad, podrás ver a las mismas personas como niños, adultos y ancianos o incluso habrá casos en los que ya no estarán porque se fueron o porque, lamentablemente, murieron.

"Cris Tales es capaz de generar nostalgia por el pasado y ansiedad por el futuro"

A su modo, Cris Tales también juega con lo rápido que pasa la vida y las consecuencias de los actos, tal vez no con un árbol impresionante de posibilidades cual AAA, pero sí con los suficientes escenarios posibles para sentir algo por ese NPC que estás viendo en el presente y también en su futuro sin que sepa sobre el destino funesto o brillante que le espera. Lo mismo pasa con los escenarios y en ocasiones, Cris Tales es capaz de generar nostalgia por el pasado y ansiedad por el futuro al ver como una ciudad próspera se refleja en la ruina si no se actúa a tiempo. Trabajar con 3 diseños y hacerlos correr al mismo tiempo es uno de los aciertos y curiosidades de Cris Tales. Eso sí, el juego comienza a sufrir en su apartado visual cuando hay muchos elementos en pantalla, así que en las ciudades grandes y llenas de detalles, experimentarás caídas importantes en los cuadros por segundo.

Los personajes de Cris Tales también tienen un estilo propio, al igual que los NPC, por lo que el juego cuenta con la variedad suficiente para dar cuenta de cada escenario y cada situación, no encontrarás un tipo de personaje genérico. Quizá el único punto no tan favorable a considerar en ese sentido es que la variedad de enemigos normales es limitada, pero eso sí, los jefes sí tienen un diseño especial que los hace valer visualmente como tales. Las animaciones durante la batalla y en algunas cinemáticas son fluidas y responden a la propuesta del juego.

El apartado de audio también está bien logrado con diálogos en voz y buenos efectos de sonido e las batallas, nada espectacular, pero bien logrado. Eso sí, uno de los puntos donde Cris Tales luce es en su banda sonora y música incidental con temas compuestos por Tyson Wernli, compositor independiente que supo capturar los momentos del juego para añadir la música adecuada que resalte aquellas situaciones de felicidad, tristeza, drama, triunfo o derrota.

Una experiencia de juego con altibajos

Cris Tales es un RPG de estilo tradicional por lo que durante toda la aventura pasaremos por secciones en que se desarrolla la historia, seguimiento de una línea principal de misiones, algunas secundarias, áreas de enfrentamientos random, resolución de algunos retos o acertijos y enfrentamientos con jefes. En ese sentido, el juego cumple con todo lo que podrías esperar o recordar de un JRPG, algo que puede dividir opiniones pues también se trata de una propuesta alejada de las tendencias actuales del género, enfocado más en la acción y privilegiando la libertad de movimiento, exploración e interacción.

Siguiendo lo anterior, Cris Tales también cuenta con elementos tradicionales del género, como el combate por turnos, la acumulación de experiencia, el uso de magia, ítems y equipo, así como la necesidad de comprensión de los elementos y su impacto, positivo y negativo, en las batallas. En sí, Cris Tales no sale en ningún momento de ese molde, pero sí es de destacar la forma en que lo presenta pues, aunque básica, es concisa y va al grano. De hecho, este título podría ser un inicio perfecto para quien quiera meterse en el género y sin problema es posible recomendar a Cris Tales como una obra que también puede ser didáctica para la comprensión de los JRPG siendo un punto de entrada que, quizá, motive a nuevas generaciones o a aquellos que se han mantenido al margen de este tipo de juegos.

Como te mencionamos, en Cris Tales todo gira alrededor del poder de Crisbell como Cronomaga y el uso de los cristales que le permiten ver el pasado y el futuro, de manera que la mayoría de formas de interacción van por el mismo camino. Esta propuesta es el añadido del equipo de desarrollo para su obra y es el apartado donde se mantendrá el enfoque del juego. En cuanto a la relación con los personajes y el desarrollo de la historia, Cris Tales atina en generar interés y motivar al jugador a seguir pues en un solo cuadro puedes ver el presente y futuro de las personas; el impacto de las decisiones también es visible en tiempo real y queda como decisión del usuario hacer o no hacer algo que puede cambiar el futuro. Por citar un ejemplo, decidir salvar o no a un pequeño que fue tragado por las alcantarillas puede cambiar de inmediato el futuro de una ciudad, pues el oficio que hubiera aprendido, en caso de sobrevivir, sería de mucha utilidad para la reconstrucción.

En general, este tipo de interacciones resultan atractivas pues nutren el desarrollo de la historia y te permiten relacionarte con el mundo fantástico de Cris Tales de otras formas. Claro está que tampoco estamos ante un sinfín de casos así y sin duda el juego termina por ser limitado en cuanto a esas posibilidades, algo comprensible si tomamos en cuenta que estamos hablando de un indie, pero que en definitiva deja con ganas de que hubiera más contenido de ese tipo.

Por otra parte, las batallas por turnos en Cris Tales siguen patrones clásicos del género, aunque al añadir el poder de Crisbell entra en juego un elemento estratégico y es que el impacto del pasado y el futuro en los enemigos abre posibilidades adicionales en materia de ataque y defensa. De nueva cuenta, Cris Tales atina en cuanto a la enseñanza del sistema de batalla, con instrucciones precisas y ejemplos claros, algo que vale mucho la pena para quien no está familiarizado con el género y mucho menos con el combate por turnos.

Aunque básico, el sistema de batalla y la implementación de los cristales del tiempo añaden un extra interesante a los combates que hace pensar un poco de forma más estratégica. Quizá lo primero que te venga a la cabeza al enfrentar a un guardia es que ponerlo detrás del cristal del futuro sea la opción idónea, pues se volverá viejo, pero esto también implica que estará en su versión más desarrollada y, por ende, podrá usar ataques y movimientos especiales más poderosos. Si bien la oferta de enemigos es limitada y lo más interesante tiene lugar con los jefes, Cris Tales ofrece un sistema de batalla sólido y fortalecido con la tradicional acción para elevar el daño hecho y minimizar el recibido al apretar un botón en el momento adecuado; en este caso, cuando la pantalla se oscurece.

Lamentablemente, Cris Tales está muy lejos de la perfección y tiene detalles que no podemos pasar por alto y que pueden ensombrecer la aventura. Si bien el sistema de batalla está bien logrado, el balance es inadecuado y es un hecho que la mayoría de las batallas serán fáciles y podrás superarlas, incluso, con ataques básicos, hecho que convierte en un desperdicio la existencia de movimientos especiales combinados y en ocasiones el mismo sistema de cristales temporales pues habrá batallas en que ni siquiera los usarás o de plano olvidarás que están ahí.

De la misma forma, Cris Tales, cuenta con una gran cantidad de pantallas de carga tanto para entrar en ciudades y locaciones específicas, como en cada batalla. En aquellas secciones en que se presentan enfrentamientos random, la aparición de enemigos puede darse entre los 10 y 25 segundos, pero la misma falta de variedad de rivales y la presencia de las pantallas de carga, terminan por volver tedioso el combate y habrá momentos en que odiarás cuando suceda pues corta el avance y termina por chocar con el interés que el mismo juego y su historia van generando. Sabemos que en un RPG clásico el grinding es una norma y no hay problema con tener muchos enfrentamientos, sin embargo, Cris Tales pudo hacer más para presentarlos de mejor forma y sin que se convirtieran, a veces, en un dolor de cabeza.

"Las pantallas de carga cortan el ritmo del juego y a veces se vuelven una pesadilla"

Ahora bien, en cuanto a mi experiencia de juego para esta reseña, Cris Tales terminó por convertirse en una pesadilla en algunos momentos pues en la versión de Xbox hay un error que provoca que al regresar de cada pantalla de carga el control no responda, de manera que tienes que apagarlo y encenderlo para seguir jugando, algo que, parece, tiene que ver con la nefasta sincronización de datos en línea en Xbox LIVE. Esto no ha sido resuelto hasta el momento y es una pena, pues Cris Tales está en Xbox Game Pass, una importante plataforma de difusión. Dicho esto, mi recomendación es que, por el momento, eviten la versión de Xbox y opten por la de Switch, PlayStation o PC para evitar este problema que se vuelve frustrante.

Cris Tales: uno de los juegos más interesantes que se han creado en América Latina

Como propuesta general, Cris Tales es un juego bueno y atractivo que cumple con su cometido al retomar las raíces de un género que formó a muchos jugadores en nuestra región y darles algunos toques adicionales. Aunque sus altibajos le juegan en contra, se trata de una aventura que te mantendrá entretenido durante las más de 20 horas que dura. Pensándolo como un RPG ligero y con la suficiente tolerancia para con sus detalles negativos, Cris Tales es una experiencia recomendable, no la Octava Maravilla por supuesto, pero que vale la pena y sin duda es uno de los juegos más interesantes que han sido creados en América Latina.

Cris Tales: una aventura hecha en América Latina