One Piece: Burning Blood PlayStation 4

Si hiciéramos una lista de los animes más entrañables de la historia, encontraríamos entre los primeros 10 lugares a One Piece. Sus escenarios, variedad de personajes y cantidad de arcos narrativos son sólo algunos elementos que le dan un valor especial a esta serie que hasta la fecha ha tenido una buena cantidad de entregas en consolas, portátiles y hasta dispositivos móviles.

Pero hasta ahora los desarrolladores no han cumplido un capricho de los fans de la serie: un título de peleas digno que tenga la esencia de los combates que vemos tanto en el anime como el manga. Por esa razón, la gente de Bandai Namco decidió desarrollar un juego distinto con el recién anunciado One Piece: Burning Blood, y nos hablaron de él en nuestro más reciente viaje a Japón, previo a la celebración de Jump Festa.

Lo primero que hay que señalar es que ésta será la primera vez que veremos un juego de One Piece publicado en Xbox One. Fue gracias al constante apoyo de los fans a través de redes sociales que viven fuera de Japón que Bandai Namco decidió que lo mejor era publicar Burning Blood en esta plataforma.

La base de este juego son combates por equipo de 3 contra 3. Los elementos principales de éste son el uso de las devil fruits y haki. Para los que no están familiarizados con la serie del mangaka Eichiro Oda, las devil fruits son frutas que dan habilidades especiales a quien las come, mientras que haki es un poder misterioso que vive en los seres humanos y que no todos logran despertar.

Mantener estos 2 elementos en One Piece: Burning Blood tiene puntos a favor y en contra. Por un lado, el juego se mantiene fiel a la serie, y por el otro, provoca que las peleas duren un tiempo exagerado. Este es un apartado en el que Spike Chunsoft, el equipo de desarrollo, tendrá que trabajar porque resulta muy molesto.

A primera vista podrías pensar que es una calca del juego que salió este año en nuestra región, J-Stars Victory Versus Plus, sin embargo, One Piece: Burning Blood tiene un mundo base con reglas claras. Si bien es el mismo desarrollador el que está detrás del proyecto, no significa que el juego sea una burda copia de todo lo que han hecho antes. Koji Nakajima, productor de la nueva entrega, deja muy claro que el objetivo principal, como mencionamos, es mantenerse lo más apegados a esta historia, que nos preguntamos si algún día llegará al fin.

El juego se mantiene fiel a la serie

Algo que destaca a la hora de jugar One Piece: Burning Blood es la amplitud de los escenarios. Hay suficiente espacio para pelear y plantear estrategias. El ritmo es veloz, a veces al punto de ser caótico, pero sin perder la esencia que un título de peleas debe tener.

Para nuestra mala suerte, no nos revelaron algo especial del lado de la historia; sin embargo, el escenario pinta para estar basado en hechos más o menos recientes dentro de One Piece.

Por ahora están confirmada la presencia de 18 personajes entre los que encontramos a Monkey D. Luffy, Portgas D. Ace, Sabo, Doflamingo, Crocodile, Enel, Bartolomeo, Zoro y Franky. En cuanto a escenarios visitaremos tierras conocidas como Dressrosa, Corrida Coloseum, Alabasta, Skypiea, Drum Kingdom y Thousand Sunny.

One Piece: Burning Blood tiene suficientes bases para ser un juego de pelea basado en la serie, sin embargo, aún necesita muchos ajustes para ser un título atractivo, y para ello los desarrolladores aún cuentan con algunos meses.

Si todo marcha conforme a lo planeado, One Piece: Burning Blood saldrá para Xbox One, PS4, PS Vita y PC en junio de 2016 con doblaje en japonés y subtítulos en español.