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Ratchet & Clank está cerca de cumplir 15 años como franquicia. En 2016, Sony Interactive Entertainment decidió reimaginar la serie creada por Insomniac Games. El plan es relativamente ambicioso: una película animada por computadora acompañará la actualización y relanzamiento del primer Ratchet & Clank, que originalmente salió en 2002 para PlayStation 2.
Durante toda la semana pasada he estado jugándolo y disfrutándolo. En cuanto a su duración, calculo un poco más de 10 horas, sin hurgar el mundo en busca de todos sus secretos, y quizá unas 15 o 16 si quieres conseguirlo todo. A pesar de que se trata de una “reimaginación” del primer juego de la franquicia, eso no implica que no tenga elementos de entregas posteriores. Por ejemplo, emplea el sistema para mejorar tus armas que fue introducido por primera vez en Going Commando e incluso hay armas nuevas como el Pixelador, que transforma a los enemigos por un instante en figuras de pixeles y hace muchísimo daño (es especialmente bueno contra cierto jefe).
La serie no es muy conocida en Latinoamérica, así que explicaré brevemente de qué va el juego. Controlas a Ratchet, un animal antropomorfo de la raza imaginaria Lombax, y a Clank, un robot defectuoso, pero inteligente y tenaz. La trama gira en torno a los Blarg, unos alienígenas que, cansados de vivir bajo tierra, emprenden una agresiva campaña con un fin oscuro. Nuestros héroes serán “ayudados” por el capitán Qwark, un superhéroe fanfarrón. En cuanto al diseño de juego, si amas los títulos de plataforma y no has probado Ratchet & Clank, esta entrega es un fantástico pretexto para empezar. El juego tiene un ritmo magnífico: combate, plataformas, secciones en vehículos y naves, jefes, agua, rieles que puedes recorrer gracias a tus Deslizabotas, y acertijos, entre otros elementos, producen una agradable sensación de progresión sin aburrimiento.
Un buen reto
Ratchet & Clank, así, fluye entre cinemáticas muy bien logradas, escenas tomadas de la película, naves espaciales, jefes con un buen reto, armas con efectos locos y que mejoran sustancialmente con sus actualizaciones, enemigos interesantes y creativos, un guión bien escrito y líneas divertidas. Realmente quedé muy sorprendido con la calidad de la animación, la frescura de los escenarios y la calidad del doblaje al español latinoamericano. El sistema de selección de niveles permite ir y regresar de un planeta a otro gracias a tu nave; de esta forma ,puedes completar objetivos opcionales si estás atorado o cansado del mundo en curso. En una ocasión, me ocurrió que debí regresar a buscar un ítem necesario para poder seguir avanzando. No es algo que vayas a realizar muy a menudo, pero pasa.
Hay secciones en las que controlarás a Clank, quien no es muy fuerte, pero tiene a su disposición habilidades únicas que le permitirán resolver acertijos sencillos, pero bien logrados, utilizando pequeños robots a los que puedes modificar el estado. Nada que revolucione el mundo de los puzzles, pero es un cambio de ritmo bienvenido en contraste con la acción frenética del resto del título. También hay un artefacto llamado Intruso, que te permitirá hackear puertas por medio de un minijuego en el que deberás alinear lásers. A medida que avanza el juego, la dificultad de los problemas aumenta; en mi opinión, sí cortan un poco el ritmo de Ratchet & Clank, pero por fortuna, puedes resolverlos inmediatamente, si aceptas no recibir trofeos relacionados con ellos ni ciertas bonificaciones. La decisión será tuya.
En cuanto a la variedad de armas, quienes hayan jugado títulos anteriores de la franquicia saben de qué hablo: lanzacohetes, bolas de disco que ponen a bailar a los enemigos, granadas, discos afilados, el fantástico Mr. Zurkon (un robot asesino que grita a los enemigos cosas como “te perdonaré la vida, alienígena… no es cierto, Mr. Zurkon vive para matar” mientras los acribilla con misiles), un arma que te permite disparar como francotirador y muchas más. Algunas las usarás muy poco durante el juego, pero otras se convertirán en compañeras fieles frente a las hordas de enemigos. Esto será realmente importante una vez que termines el título y comiences el modo Desafío, que permite conservar las armas y empezar todo otra vez, pero con una dificultad mucho mayor.
Cada arma puede actualizarse mediante un mineral que está escondido en el mundo. Recomiendo mejorar al máximo el Magmabuster, pues su munición es abundante, realiza una buena cantidad de daño y es muy versátil. Otro equipo invaluable es el Protoclástico, que salvará tu vida cuando enfrentes a muchos enemigos al mismo tiempo. Contra jefes y naves, recomiendo el percutor de plasma, que permite identificar puntos débiles y disparar desde una distancia segura gracias a sus 3 niveles de zoom. Los veteranos deberán jugar en difícil; quienes nunca se han adentrado en la franquicia, en normal; y para los pequeños de la casa, está fácil. Menciono esto porque normal puede presentar retos
difíciles para un niño, en especial, los jefes, pues no tienen etapas con puntos de guardado y, si mueres, aunque les quede 1% de vida, deberás comenzar desde el principio.
La música es olvidable, pero acompaña agradablemente la experiencia. Ratchet & Clank destaca por su aspecto visual: colores brillantes, mundos imaginativos, efectos bien logrados, enemigos vibrantes y divertidos. Aunque el diseño de algunos personajes no es de mi agrado (un elemento heredado de los tiempos del PlayStation 2), los planetas son únicos y tienen configuraciones interesantes que aprovechan los ítems de los protagonistas que no existían cuando fue lanzado el título original, como la mochila propulsora.
En torno a todo esto, hay unas tarjetas coleccionables que desbloquean bonificaciones y expanden la trama sobre personajes y objetos de la franquicia. También hay un museo Insonmiac que se desbloquea al acabar el título. En su conjunto, Ratchet & Clank es una experiencia de plataformas sólida, sólo aquejada por ligerísimos problemas de frame rate durante los enfrentamientos de naves, algunas frustraciones en el diseño de los niveles (como atajos que sería posible tomar si no hubiera paredes invisibles), vueltas innecesarias para la trama, pero que justifican extender el juego, y los acertijos del Intruso.
Fuera de lo anterior, Ratchet & Clank comienza como un título de plataformas tradicional, en el que debes concentrarte en llegar de una plataforma a otra, vencer enemigos con ataques cuerpo a cuerpo y desplazarte por el mundo. Sin embargo, a medida que avanzas, se transforma en un shooter con aires de run & gun, en el que saltar mientras disparas a las hordas de enemigos es satisfactorio y divertido. La entrega tiene sus momentos de exploración y de aproximarse al combate con estrategia.
Ratchet & Clank me deja con un muy buen sabor de boca. Es una propuesta perfecta para los amantes de las plataformas y la acción en tercera persona. Es accesible para los pequeños del hogar, pero con cambiar la dificultad entretendrá al jugador experimentado y que no guarde prejuicios contra las ambientaciones de ciencia ficción infantil. Tiene un ritmo de juego envidiable y desarrolla sus mecánicas de juego de formas interesantes, aunque me hubiera gustado ver un poco más experimentación con lo que se puede hacer con las armas y más secciones con naves y eventos especiales. En general, es un regreso bienvenido y una reimaginación muy bien lograda.
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