Es indudable que Minecraft ha sido un éxito rotundo con más de 238 millones de unidades vendidas a lo largo de sus 13 años de existencia; ¡es el juego más vendido en la historia de los videojuegos! No obstante, sus spinoff, como Minecraft Dungeons y Minecraft: Story Mode, no han logrado impresionar tanto como el juego original, aunque es posible que tengan un propósito diferente. Estas entregas buscan diversificar la franquicia y son una oportunidad su audiencia tenga la oportunidad de explorar nuevos géneros. Tal vez este es el verdadero propósito de Minecraft Legends, el spinoff más reciente de la serie que decidió explorar nuevos horizontes. Enseguida te comparto mi veredicto del juego.

Minecraft Legends es un videojuego que fusiona los géneros de aventura hack and slash y estrategia en tiempo real con el estilo artístico y algunos elementos de Minecraft. La premisa consiste en construir fortificaciones alrededor de las aldeas para salvaguardarlas de los ataques de los piglins, y luego emprender la batalla contra las fortalezas enemigas. Esta combinación recuerda, en los momentos más destacados, a juegos clásicos como Tower Defense y algunos del género musou, sin dejar de lado las raíces de Minecraft. Cabe destacar que, si bien puede resultar emocionante para algunos jugadores, es posible que los puristas de Minecraft que prefieren mantenerse fieles al juego original no lo consideren la mejor opción pues carece de muchísimos de sus elementos principales.

VIDEO: La historia detrás de Minecraft

¡Llegaron los piglins!

Para comenzar, el primer paso en Minecraft Legends es adquirir recursos que posteriormente se utilizarán para la construcción de estructuras y la formación de ejércitos. A diferencia de la mecánica de recolección con un pico de diamante en el juego original, en este título se emplean Aliados, pequeñas criaturas especiales que recolectan automáticamente la materia prima. Después, es esencial proteger a los aldeanos indefensos que habitan en distintos biomas como pantanos, selvas, sabanas y tundras. Para lograrlo, los recursos recolectados se utilizan para construir murallas y torres defensivas, así como para formar un ejército propio.

Paso a paso, Minecraft Legends se va transformando en un juego de estrategia en tiempo real. En primer lugar, debes planificar la ubicación ideal para construir torres de vigilancia alrededor de la villa. Asimismo, existen edificios especiales que potencian otras estructuras. Por otro lado, formar un ejército es crucial para combatir a los piglins, y se tienen opciones especiales para controlar las unidades, aunque no es una tarea sencilla. En poco tiempo, lideras un ejército que te sigue al campo de batalla para enfrentar a los piglins. Es una experiencia emocionante, especialmente en etapas avanzadas del juego, cuando la cantidad de unidades enemigas es significativa y cuentas con actualizaciones que te ayudan a formar un ejército cada vez más poderoso, aunque con poca variedad de unidades.

La cámara en tercera persona te permite tener una vista aérea de la zona, como si fueras un gran general supervisando todo. Es sencillo observar por dónde atacan los piglins para interceptarlos rápidamente. Además, es divertido descubrir que puedes construir edificios en cualquier lugar, no solo dentro de la aldea. Así, puedes inundar un área con torres defensivas, por ejemplo, alrededor de un oponente poderoso, como un método para ganar tiempo aunque sea costoso.

"La experiencia estratégica en este caso se consuma de una manera más plena, ya que constantemente me vi haciendo ajustes en las tácticas"

La mecánica de Minecraft Legends es entretenida aunque bastante sencilla y capaz de mantener a los jugadores cautivados durante horas. Todo sucede en un mapa de gran tamaño, dividido en diferentes biomas que ofrecen materiales comunes como madera y piedra, así como recursos únicos de cada ecosistema, como hierro, carbón y redstone. Es dentro de este escenario que se encuentran las bases para defender y las fortalezas piglins para atacar, pero no puedes aventurarte a la ofensiva apenas inicias la aventura. La amenaza piglin es real, y todas las noches estos malvados enemigos organizan ataques contra campamentos aliados o villas. A veces, incluso levantan nuevos campamentos para expandir su territorio. Es fácil darse cuenta de la clase de aventura en la que estás inmerso, y en cualquier momento podrías encontrarte en un dilema entre defender a tus aliados o tomar la iniciativa y llevar la lucha a los piglins. La rapidez y la astucia son claves en este juego, ya que los piglins no tienen piedad y avanzan implacablemente.

En el universo de cubos, se presentan tres grupos de facciones piglin que han erigido gigantescos portales de los cuales se propagan sin cesar. Tu misión es destruirlos. Tomar estas fortalezas requiere una mayor inversión de tiempo, ya que el avance hacia el centro del enemigo debe ser sistemático. Además, dependiendo del nivel de poder de la base (máximo tres), es necesario derribar las torres que hacen al portal invulnerable. Personalmente, encontré más emocionantes estas misiones que las defensas de las aldeas, pues las fortalezas se encuentran en terrenos elevados y se necesita diseñar una ruta, construir puentes y limpiar el terreno de obstáculos que impiden construir para llegar al objetivo. La experiencia estratégica en este caso se consuma de una manera más plena, ya que constantemente me vi haciendo ajustes en las tácticas. Por ejemplo, formando en líneas a mis unidades y separándolas por tipo, así como consiguiendo criaturas de los alrededores para aumentar mis refuerzos. Además, en varias ocasiones tuve que retroceder para reabastecer mis suministros en rápidas carreras y poner a recolectar a los aliados. En estas situaciones, Minecraft Legends brilla de manera extraordinaria.

VIDEO: Minecraft Legends: ¡Lo Bueno, lo Malo y lo Meh!

Sin profundidad estratégica

No obstante, Minecraft Legends no logra cumplir con las expectativas ya que, en general, resulta bastante débil. Desde una perspectiva estratégica, controlar las unidades se torna engorroso, ya que seleccionar a los arqueros para ordenarles un ataque resulta difícil. En los asedios, el ejército suele permanecer inmóvil debajo de los puentes, ya que tienden a caerse con frecuencia. En lugar de sentirme como un guerrero heroico, más bien me parecía un pastor con sus borregos. En cuanto al combate, resulta excesivamente simplista, ya que solo se tiene una especie de ataque y no existen combos, poderes o habilidades. Al final, la estrategia se reduce a obtener la mayor cantidad de unidades y mantener un flujo constante de carne de cañón.

En cuanto a la construcción de fortalezas, el concepto de defenderlas se encuentra desaprovechado, ya que la cámara y el sistema para posicionar objetos en el suelo resultan imprecisos. Olvida la idea de diseñar y construir fortalezas estéticas como en Minecraft, ya que la norma es soltar torres y paredes en formaciones desalineadas y por donde sea necesario, sin preocuparse por la estética. Además, el sistema de actualizaciones de estructuras aporta poco a la estrategia, ya que tienen un impacto mínimo.

Antes de concluir, el concepto de Minecraft Legends me parece extraño. A pesar de haber jugado Minecraft por más de 10 años, nunca había experimentado con un laúd como mecánica principal. En Minecraft Legends, la música es crucial para ordenar a los aliados construir, recolectar y hacer muchas otras cosas. Sin embargo, durante las decenas de horas que puede durar la experiencia, no se aprenden notas, melodías o canciones, por lo que la música parece no ser un componente importante en el juego. En última instancia, el instrumento podría ser reemplazado por cualquier otro objeto sin afectar significativamente la jugabilidad.

En conclusión, Minecraft Legends es un experimento en la franquicia que busca atraer a una audiencia que solo conoce Minecraft y presentar nuevos géneros como la estrategia en tiempo real. Sin embargo, el juego carece de profundidad y complejidad en términos de combate y estrategia, lo que lo hace adecuado solo para jugadores jóvenes o como una curiosidad para aquellos que buscan explorar nuevos géneros. Minecraft Legends no alcanza la calidad y profundidad de su predecesor y deja mucho que desear para aquellos que buscan un desafío más complejo y estratégico.

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