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Todos alguna vez nos hemos imaginado que volar un avión puede ser realmente difícil y que requiere muchos años de experiencia. Es esta específicamente la sensación que da Microsoft Flight Simulator al momento de jugarlo por primera vez, pero créanme que ya al paso de unas cuantas horas y varios tutoriales el juego se torna amigable, emocionante y abismalmente enviciante.
El juego
Microsoft Flight Simulator 2020 marca el regreso de una franquicia que dio sus primeros pasos en 1982 y que hoy, luego de 3 décadas, vuelve con uno de los simuladores más completos y realistas que existen. Sin duda alguna todos los fanáticos de la aviación querrán tener este título en su biblioteca, ya que es lo más cercano que tenemos todos los mortales de pilotar un avión por los cielos de ciudades lejanas.
El simulador fue desarrollado por Asobo Studio y llega a llenar los corazones de los aviadores que no veían un título de la saga desde hace más de 10 años. Dentro podremos encontrarnos con una sorprendente simulación de la tierra en tiempo real, con clima real y más de 341 ciudades “fotorealistas” (lamentablemente la mayoría de ellas están en Europa y Estados Unidos). Además el título presenta 40 aeropuertos idénticos a su par de la realidad y 30 aviones copiados al más puro detalle.
La última entrega del simulador de vuelo más famoso del gaming es un título asombroso, tanto en su calidad gráfica, como en su realismo de físicas de vuelo y controles. En el primer momento que nos sentamos en la cabina quedamos intimidados por la cantidad de botones, perillas y controles que tenemos a nuestra disposición, pero los varios tutoriales ayudan a no perder el entusiasmo.
Personalmente es mi primera vez con un simulador de vuelo pero sorprendentemente el videojuego ha llenado completamente mis expectativas. Una vez que te familiarizas con los controles no puedes dejar de recorrer las ciudades de tus sueños. Puedes en una tarde recorrer París, Londres y Tokio, al mismo tiempo que te deleitas con sus grandes rascacielos e icónicos monumentos.
Mi Experiencia
Como muchos de nosotros los gamers a veces hacemos, en mi primera partida con Microsoft Flight Simulator decidí saltarme los tutoriales y tratar de despegar por mi cuenta en el Aeropuerto Internacional de Haneda, Tokio. El resultado no dejó mucho que desear y luego de varios minutos ni siquiera pude encender los motores del avión (no sé porque pensé que sería buena idea intentar primero con una avión de pasajeros).
Tragándome mi orgullo de gamer decidí probar los tutoriales y entendí la diferencia entre un videojuego común y un simulador. En ellos te enseñan los elementos básicos de la aviación, las físicas de vuelo (que yo tenía ampliamente distorsionadas por mis vuelos en GTA) y el funcionamiento básico de las aeronaves.
El resultado luego de varias horas en los tutoriales fue maravilloso, logré despegar mi Cessna 152 de la pista del aeropuerto de Santiago, Chile. Lamentablemente esta ciudad no es parte de las ciudades que están recreadas idénticamente a la realidad, destacando la horrible forma del Costanera Center ficticio, pero una vez que agarras altura, comienzas a notar que la gracia del título también está en el cielo, el clima y las increíbles postales que observé desde la ventana de la avioneta.
En ciudades más turísticas como París o Nueva York puedes notar el increíble lujo de detalle en sus edificios más emblemáticos, así como apreciar la inmensidad de lo que realmente significa una mega urbe. Otro punto importante a mencionar es lo entretenido que puede ser jugar con el clima, ya que puedes modificarlo a tu gusto dentro del vuelo y disfrutar de las ciudades que con cada clima diferente, muestran una nueva faceta.
Claramente las guías, que funcionan a modo de lista de tareas pendientes, son un verdadero acierto. En todo momento te sientes acompañado por estos dictámenes que te van marcando los pasos a seguir, por ejemplo, durante el despegue. Una vez que ya empiezas a memorizar los pasos, puedes cerrar esta lista y consejos y volver a abrirlos si es que los necesitas de nuevo.
Otro punto importante a destacar son los controles, a pesar de ser muchos y un poco incómodos al momento de jugarlo solo con teclado y mouse, en el momento de agregar un joystick (de Xbox en mi caso) todo se simplifica, en especial por las ayudas de la lista de tareas ya mencionada.
Por último, el juego trae un modo de piloto automático que puede sacarte de aprietos (en más de una ocasión me salvo de estrellarme contra el suelo). También puedes utilizar este modo para dedicarte a ver el paisaje y sacar tus mejores panorámicas.
Los Gráficos
El apartado gráfico es simplemente realista, puedes comparar las vistas con cualquier foto de la ventana de un avión en Google y tal vez un despistado no notaría que se trata de un videojuego. La fluidez del simulador es envidiable y en todo momento podrías sacar una foto para wallpaper nueva.
El lujo de detalle dentro de los aviones también hace la experiencia aún más inmersiva. Los paisajes de llanuras, cordilleras, playas y todo lo que puedas encontrar en esta réplica del planeta Tierra son alucinantes. El mapa fue hecho con imágenes satelitales reales y tiene la opción de sincronizar el juego con el tiempo y meteorología en tiempo real.
Tengo que admitir que al momento de acercar el avión al nivel del suelo, a veces puedes verte un poco decepcionado, pero realmente en un simulador de vuelo no buscamos estar a 50 metros del suelo. Las ciudades presentan un grado de realismo envidiable para un videojuego que fue modelado a partir de imágenes satelitales.
El sonido diferente de cada avión y la inmersión que genera este ambiente sonoro al acelerar, desacelerar, cambiar de altitud o simplemente mover los flaps es un gran plus.
Conclusiones
Realmente no es un juego que pueda ser del agrado de todos en primera instancia por su complejidad, pero al cabo de unas horas logra engancharte como si se tratara de la historia más alucinante. No esperes que Microsoft Flight Simulator te mantenga agarrado a la silla pero sin embargo te mantiene al tanto de todos esos pequeños detalles que lo convierten en una experiencia inmersiva insuperable.
Si alguna vez quisiste ser piloto de avión para recorrer las megaciudades y maravillas del mundo, este título puede ser para ti. Tienes que tener siempre en cuenta que es un simulador de vuelo y que tienes que dejar atrás todo lo que crees saber sobre vuelos, física y sobre todo las películas.
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(Fuente)
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