Comprar videojuegos y contratar servicios para disfrutarlos es más fácil que nunca. Sólo necesitamos una tarjeta bancaria, una conexión a Internet y un poco de tiempo para conseguir todo lo que queremos desde la comodidad de nuestras casas.
Sin embargo, no todos tienen acceso a una tarjeta, lo que complica las cosas. Un jugador de PlayStation estaba en esta situación, así que decidió pedirle ayuda a su maestro para poder contratar PlayStation Plus y disfrutar muchos juegos en su consola.
Su entrenador de esports accedió y le prestó su tarjeta de crédito, pero pronto se arrepintió. Esto debido a que el jugador aprovechó la ocasión para gastar más de $1000 USD sin permiso en la PlayStation Store. Molesto y preocupado, el maestro llamó a la policía e interpuso una denuncia contra el fan de PlayStation.
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Jugador gasta cientos de dólares sin permiso en la PS Store
Este peculiar caso ocurrió hace algunos días en Jonesboro, Arkansas, Estados Unidos. Todo empezó cuando un jugador de PlayStation no identificado le pidió ayuda a Stuart Simpson, su entrenador de esports, para poder contratar varios meses de PlayStation Plus.
El joven no tenía una tarjeta de crédito para hacer el pago, así que le pidió el favor a Simpson. El entrenador accedió y colocó sus datos bancarios en la consola del jugador, pero más tarde se llevó una desagradable sorpresa.
De acuerdo con los detalles, el jugador consiguió su suscripción al servicio de Sony y, tiempo después, Simpson intentó eliminar su información de la consola. Fue entonces que se enteró de la mala noticia: el joven había usado varias veces su tarjeta sin su autorización para adquirir diverso contenido digital, el cual no fue revelado en el reporte de la policía.
Simpson se percató que había cargos por $1056 USD en su tarjeta que no había autorizado. Todos ellos se habían realizado en la PlayStation Store. Por supuesto, no se quedó con los brazos cruzados e hizo algo al respecto.
El jugador fue denunciado ante la policía
Tan pronto como Simpson vio lo que había hecho su alumno, puso manos a la obra para solucionar el problema, pues no estaba dispuesto a pagar una deuda que no era suya. Llamó a su banco y explicó la situación, con la esperanza de que todos los cargos fueran retirados.
Para su buena suerte, el banco decidió revocar todas las compras hechas por el jugador, así que Simpson no tendrá que pagar los $1056 USD. A pesar de esto, acudió a la policía para denunciar al joven. Por ahora, no hay más información al respecto, por lo que no se sabe en qué concluirá este caso.
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