Como si la industria del videojuego no tuviera ya suficientes problemas con las situaciones violentas que se le suelen achacar, un guardavías alemán reconoció haber estado jugando poco antes de que 2 trenes de pasajeros que pasaban por el pedazo de trayecto bajo su vigilancia chocaran de frente. Lo anterior ocurrió a comienzos del mes de febrero y dejó 11 personas muertas, de modo que la persona en cuestión podría enfrentar cargos de asesinato por negligencia.
Ante la falta de evidencia de un desperfecto técnico, la línea de investigación condujo a las autoridades hacia el empleado responsable por ese fragmento de vía, cuya tarea era supervisar que el trayecto estuviera en óptimas condiciones, así como dar señales a los operadores de los convoyes que transitaban por ahí. El hallazgo fue que el guardavía abrió un juego móvil durante su turno y no lo apagó hasta poco antes del siniestro.
El servidor público de la compañía estatal Deutsche Bahn negó que la aplicación de entretenimiento lo distrajera, pero de acuerdo con el fiscal, en aquel momento dio señales incorrectas y oprimió botones equivocados cuando tenía que alertar a los choferes de los trenes involucrados, quienes por cierto, murieron en el incidente.
Evidentemente, lo anterior no es culpa del juego, sino de quien lo usa en un momento inadecuado y no es la primera vez que un título móvil da de qué hablar cuando de transporte público se trata, pero seguramente hará poco por mejorar la reputación de los videojuegos, ya de por sí maltratada cuando se le vincula injustamente a eventos violentos.
Comentarios
Mejores
Nuevos