Aunque en el marco de un entorno económico complicado, una misión a Marte luce cada vez más improbable, los científicos rusos siguen con el dedo bien puesto en el renglón y, desde comienzos de este siglo, han efectuado numerosas simulaciones de cómo sería el viaje, mismo que además de desafíos tecnológicos, implica grandes obstáculos para la resistencia humana, puesto que toma alrededor de un año y medio llegar al Planeta Rojo.
Con ello en mente, se sometió a seis sujetos -que pasaron por cosmonautas- a un experimento con duración de 520 días, periodo durante el cual permanecieron encerrados y expuestos a roces entre sus diversas personalidades. La idea de los científicos moscovitas fue determinar los efectos del aislamiento prolongado en los humanos, así como posibles soluciones, una de las cuales pudo radicar en los videojuegos.
Dicho lo anterior, los tres pseudoastronautas rusos, europeos y chinos adoptaron el popular FPS de Valve, Counter-Strike, como válvula de escape para las tensiones, con resultados sorprendentemente satisfactorios, en otras palabras, no se presentaron incidentes violentos durante la simulación.
De acuerdo con Alexander Smoleyevsky, uno de los participantes, ante el menor indicio de problemas, los sujetos serían divididos en equipos para jugar.Sabemos que las cosas se magnifican fácilmente en el espacio, así que cuando surgían conflictos, tratábamos de apaciguarlos inmediatamente, sostuvo Rustarnovich Sukhrob.
Vale acotar que otras dos variables importantes fueron la ausencia de mujeres y alcohol, toda vez que en un experimento similar aplicado en el año 2000, las cosas terminaron muy mal, con los participantes peleando a golpes por su compañera astronauta.
Estos resultados contrastan profundamente con estudios recientes, mismos que sostienen que los videojuegos competitivos contribuyen a la agresión entre sus usuarios. Así que quién sabe, tal vez veamos Global Offensive como parte indispensable del programa espacial en el futuro próximo.
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